tú.

Abrí un cajón, y buscando cualquier cosa sin importancia, encontre allí una foto tuya.
Me quede mirandola fijamente, mirandote a ti, a tus preciosos ojos. Aún no he llegado a aceptarlo del todo, que tú ya no estás conmigo, que no puedo verte cada día, no puedo abrazarte ni darte un beso, pasar un día entero contigo.
Ya son casi dos años sin ti, sin que me cuentes mil y una historias, sin que imaginemos cien formas de cambiar el mundo.

Todo esto, desde que te fuiste ha cambiado mucho, y si ahora vinieras te darías cuenta de que ya nada es como antes. Se de sobra que estés donde estés, nos estás viendo, nos estás cuidando, y no hace falta repetir que no hay una solo día que no piense en ti.
Has sido una de las peronas más importantes en mi vida, esa persona que siempre estaba a mi lado, me ayudaba en todo momento y me daba todo lo que quería. La persona que me entendía, que sabía que tenia algún problema y la persona a la que acudía cuando tenía alguna dificultad o cuando tenía algo en mi cabeza que no me dejaba dormir.
Cuando no encontraba consuelo en mis padres, acudía a ti, y tú siempre me ayudabas.

Desde aqui, no sabes lo que te echo de menos, lo que daría por poder volver a estar junto a ti y poder decirte una vez más que te quiero.


(el cielo se equivocó llevándose a quien no debía)